El luchador marroquí de "kickboxing" Badr Hari- uno de los mejores amigos del astro portugués Cristiano Ronaldo-, condenado a dos años de prisión por varios actos de violencia y altercados nocturnos en Ámsterdam, saldrá de la cárcel a finales de esta semana tras cumplir la totalidad de su pena, confirmó ayer su portavoz, Jacques de Wit.
El deportista, de 32 años y nacionalidad neerlandesa, será liberado el viernes.
Hari saltó a la fama mundial extradeportiva por su cercana relación con Ronaldo. A ambos personajes se les veía muy cercanos y protagonizando diversas fiestas privadas. Incluso se rumoraba sobre una posible relación entre ambos, alimentada por sugerentes fotos. En una de ellas, aparecía el marroquí cargando entre sus brazos a CR-7.
El atelta ha estado detenido durante los últimos siete meses y 10 días, después de que el pasado febrero el Tribunal Supremo de La Haya condenara al deportista por "un asalto con agravante" al empresario holandés Koen Everink durante una fiesta nocturna en Ámsterdam en 2012.