La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó hoy de siete nuevos casos de gripe aviar en humanos, por la nueva cepa H7N9 del virus, todos ellos registrados en China en la última semana y de los que seis se encuentran en situación crítica.
De todos los infectados, cuatro pacientes han estado en contacto con animales en granjas avícolas, señaló la OMS en un comunicado divulgado el Ginebra.
Ayer se confirmaron los tres últimos casos, que afectan a una mujer de 54 años de la provincia de Jiangsu; a otra de 51 años de la región de Guangdong -ambas en estado crítico y en contacto habitual con aves-; y un hombre de 31 años, también de Guangdong, que es el único que se encuentra en situación estable.
El pasado 6 de enero, los servicios de salud de China confirmaron dos nuevos casos, de dos hombres, uno de 47 años y un granjero de 71 años, ambos de Guangdong, en estado crítico y en contacto habitual con aves.
En la provincia de Zhejiang se confirmó el pasado 5 de enero el caso de una mujer de 34 años; y un día antes, el de un hombre de 86 años, de Shangai, que había entrado en contacto con animales.
El origen de este brote de infecciones de gripe aviar está todavía bajo investigación y, por el momento, no hay evidencias de que se haya producido una "transmisión entre humanos sustancial", precisó la OMS.
El Gobierno chino ha puesto en marcha medidas de control y vigilancia del brote y la OMS no aconseja de momento los controles en los puntos de entrada al país ni restricciones a los viajes o al comercio.