Con el inicio de la Semana Santa, la Basílica Menor del distrito de Atalaya se transforma, desde este miércoles, en el epicentro de oraciones y reflexiones para miles de católicos y creyentes en el Cristo Milagroso Jesús Nazareno, según indicó el párroco Marcelino González.
El sacerdote destacó que decenas de personas permanecen en este lugar con el objetivo de vivir un espacio espiritual en esta fecha especial, en la que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Entre los testimonios de fe se encuentra el de Manuel Vega, residente de la ciudad capital, quien compartió que, aunque no pudo participar de la reciente romería debido a una hospitalización, Jesús Nazareno de Atalaya le dio la fortaleza para poder acudir a sus pies en esta Semana Mayor. Vega explicó que su fe lo ha mantenido con vida, tras superar una delicada cirugía, y que logró pagar su manda, orando por su salud y la de sus familiares.
Por su parte, el párroco Marcelino González informó sobre las actividades religiosas programadas para estos días, destacando que muchas personas optan por permanecer en la basílica, practicando ayunos hasta el Domingo de Resurrección y participando en las ceremonias litúrgicas.
González recordó además que las puertas de la Basílica Menor de Atalaya permanecerán abiertas durante toda la Semana Santa, permitiendo que los peregrinos y devotos se acerquen a la imagen de Jesús Nazareno y encuentren un espacio de recogimiento y oración.